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jueves, 22 de marzo de 2012
Rabia
Me doy cuenta de ello, soy muy consciente de ese estado que me puede y que hace que se me aceleren los pensamientos y que me cueste contener, que me cueste aplacar esa ira e indignación que me hierven por dentro y que concentro en una sóla palabra: rabia.
Rabia por no poder expresarme, por dejarq ue los demás se sobrepasen y den por hecho las cosas, rabia por las injusticias y los abusos, por ver que no cambia nada, rabia por quedar siempre en la cuneta y tener que tragar en silencio para no ofender, o molestar o conseguir enfadar a los demás.
Y no me gusta sentirme así, no me gusta sentir esas palpitaciones en mi interior, no me gusta quedarme más frío que el propio hielo y perderme en etrnos silencios, en meditadas indiferencias y en bajas miradas, no me gusta, no. Me agota y me cansa, pero... no lo puedo evitar. Y ante explotar y ser cual tsunami, prefiero callar y dejar que esa extraña ira se vaya apagando sola, y que se marche tal y como ha venido. porque en unas horas ha desaparecido, por completo.
Mis enfados duran apenas unos minutos, y me gusta que sea así... peroe sta rabia dura mucho más y cuando la siento se focaliza en alguien y eso hace que sea como un combustible más y más potente , y al verlo, al sentir cómo me subi desde los pies a la cabeza de una forma extremadamente rápida, hago acopio de fuerzas y me replego en mi mismo para no hacer un daño involuntario por una fuerza invisible que apenas domino. A veces es con razón, a veces no, a veces está compuesta por las dos... y me es muy complicado.
Ayer tuve el último brote y necesité salir a la calle para desbloquearme y permanecer callado por un rato eterno... hasta el día d ehoy que ya me he calmado y las aguas han vuelto a su cauce tranquilo y sosegado. Y ayer fue una de esas rabias con y sin razón, loq ue complica más la cosa...
Trabajo, trabajo en ello para mejorarlo, y creo que algo he conseguido en estos años que llevo intentando comprender a las personas, ahora soy consciente de ello y tan sólo se queda en eso, en una rabia puntual.
Ya veremos...
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8 comentarios:
eing? estas bien? :S
La rabia a veces nos ciega demasiado, tanto que no sabemos ni dónde estamos, desaparecemos de nuestro propio mundo y cuesta volver a encontrarnos... centrarnos...
Un beso,
;)
Jon, tranquilo, no pasa nada, lo mismo de siempre... pro al final, parece que me cansa més...
Un petó.
¡¡¡Clau!!! La ilusión que me ha hecho verte de nuevo me ha quitado toda la rabia de golpe... ¡qué inmensa alegría!No imaginas cuánto...!
pero es esa rabia que conoces y de la cual eers consciente, pero es una rabia que podría solucionarse tan sólo con el cambio de actitud de algunas personas. dee sa forma, y de un manotazo, ja,ás la volvería a sentir. porque proviene de algo consentido...¡Ay, no sé!Ando ya muy cansado tras dos turnos en el trabajo...
Espero verte mucho más por aquí y por tu blog..
Un petó de benvinguda molt gran!!!
;)
Después de darle muchas vueltas, hace tiempo que he llegado a la conclusión más tonta y obvia que ha habido jamás en el mundo: la gente no cambia. Aprendemos e incluso hasta cierto punto nos adaptamos, pero el fondo es el que es, y eso nadie lo cambia, para bien o para mal...
Descansa, no trabajes tanto... o si, que a estas alturas del partido ya no sé si trabajar mucho es algo bueno o algo malo! jajajaja
Un beso,
;)
No sé Clau, yo creo que la gente si cambia si quiere y pone un empeño verdadero en ello... Si cambian para mal, ¿por qué no para bien...? Y lo digo porque tengo un ejemplo de cada cosa..., pero no hay que engañarse, la gente no está por la labor.
Y sigo alegrandome de tenerte por aquí!!!
Mil petons!!!
Dejate de hostias, mañana subo, a que hora plegas?
Jon, tranquilo que no pasa nada, es el mismo monotema de siempre... Te acabo de envíar un mail!
petonets!!
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